¡BENDITA SEA TU PUREZA!
Un breve texto del siglo IV que rezaban los cristianos, y que fue incorporado para rezar hoy, en la solemnidad de la Inmaculada Concepción de María, con inspirados versos. Están tomados de los libros bíblicos de Judith y del Cantar de los Cantares.
Muchos compositores lo musicalizaron a lo largo de los siglos, como Schumann, Pablo Casals, Bruckner, la melodía gregoriana y músicos del canto litúrgico popular del barroco colonial americano.
Hoy es un día muy a propósito para recitar estas santas palabras:
"Tota pulchra es, María,
et macula originalis non est in te.
Tu gloria Jerusalem,
tu laetitia Israel,
tu honorificentia populi nostri,
tu advocata peccatorum.
¡Oh! María, virgo prudentissima,
mater clementissima,
Ora pro nobis,
intercede pro nobis
ad Dominum Jesu Christum"
(Purísima eres, Maria
y la mancha original no está en tí.
Tú, la gloria de Jerusalén,
tú, la alegría de Israel,
tú, el honor de nuestro pueblo,
tú, la abogada de los pecadores.
¡Oh! María, virgen prudentísima,
madre clementísima.
Ruega por nosotros.
Intercede ante nuestro Señor Jesucristo.)
En el siguiente enlace puede escucharse con la melodía gregoriana:
(En el cuadro de la foto -de la escuela del altiplano del siglo XVIII- pueden verse las palabras iniciales de este sublime canto, como si fueran expresadas por el Padre acerca de su hija dilecta, en medio de un jardín ubérrimo y con símbolos marianos -fuente, puerta, brocal, espejo, luna, torre y palmera-)
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