Centro de Profesionales de la Acción Católica "SANTO TOMÁS DE AQUINO" de Buenos Aires, Argentina.

30 de mayo de 2016

"LO MEJOR PARA CRISTO"

NUEVO OSTENSORIUM PARA LA ARQUIDIOCESIS ARGENTINA DE TUCUMÁN

Realizado por el orfebre argentino Juan Carlos Pallarols

ARTE Y NOBLE DIGNIDAD 
EN UNA PIEZA SAGRADA



La ciudad argentina de Tucumán ya cuenta con una nueva Custodia donde se expondrá el Santísimo Sacramento durante el XI Congreso Eucarístico Nacional que tendrá lugar del 17 al 19 de junio próximo en Tucumán, en ocasión del Bicentenario de la declaración de la Independencia. Fue realizada por el destacado orfebre Juan Carlos Pallarols, a partir de incontables pedacitos de joyas de oro y plata que donaron las familias tucumanas.

El arzobispo de Tucumán, monseñor Zecca, hace más de un año, presentó la propuesta de contar con una nueva Custodia, con el lema: “Lo mejor para Cristo”.

El artesano Pallarols explicó: “durante los últimos seis meses gran parte de mi tiempo lo dediqué a esta Custodia hermosa, inspirada en la antigua, realizada por mi abuelo en la época del primer Centenario y que, en el año 2011, fue robada del Museo de Arte Religioso de San Miguel de Tucumán”.

Los ladrones entraron por un boquete en el techo del Museo de Arte Sacro de la Catedral y se llevaron dos Custodias, una de oro y otra de plata. Desde entonces Tucumán carecía de un Ostensorio importante, hasta que la Fundación Amigos del Museo pidió al consagrado orfebre Pallarols, el diseño y la realización de una nueva Custodia para la Catedral.

“En esta oportunidad la hicimos en una escala un poco mayor, dada la solemnidad del Congreso Eucarístico y coincidencia con el Bicentenario de nuestra Independencia. Fue una tarea gratísima y emocionante que me hace sentir y pensar en todo lo que me precede en mi oficio”, escribió Pallarols.


El nuevo Ostensorio fue usado por primera vez ayer, en la Procesión del Corpus Domini 2016, por la calles de la ciudad de Tucumán (ver foto abajo, frente a la Casa de la Independencia)


La primera Custodia también había sido realizada en el taller Pallarols por el abuelo de Juan Carlos. La había encargado en 1924 el obispo tucumano Bernabé Piedrabuena y una Comisión de damas se había abocado con éxito a la recolección de donaciones en dinero y en joyas, en toda la ciudad. El mismo gesto tuvo por segunda vez, y con gran generosidad, el pueblo de Tucumán.

La Custodia, también llamada Ostensorium (del latín “ostentare”: mostrar) es una pieza de orfebrería, realizada en un metal precioso, en forma de torre o templete, generalmente con un sol con rayos en su centro, donde se coloca la Hostia después de ser consagrada, para la adoración de los fieles.







29 de mayo de 2016

ESPIGAS DAN HOSTIAS Y LEÑOS ALTARES

DOMINGO DEL CORPUS DOMINI 

en la Argentina




Cercanos al Bicentenario de la declaración de la Independencia en Tucumán (1816 - 9 de julio - 2016) es útil recordar unas estrofas del Himno del Congreso Eucarístico Internacional en Buenos Aires, del año 1934, cuya letra fue escrita por la señora Sara Montes de Oca de Cárdenas.

Con versos de gran precisión histórica recuerda la unión de nuestros orígenes como nación a la Eucaristía:

Pasearon el Corpus
por nuestros solares
los hombres que luego
fundaban ciudades,
Y abrían los surcos
para los trigales...
(Espigas dan hostias
Y leños altares).

Bandera tu Cuerpo
Fue en la azul atmósfera,
y el cáliz dorado
fue el sol de la gloria.
Antes que el arado
rompiera la costra.
de la tierra virgen
se elevó tu Forma.





26 de mayo de 2016

PAN DE LOS ÁNGELES Y PAN DE LOS HOMBRES PEREGRINOS

"Lauda Sion Salvatorem"
"Glorifica, Sión a tu Salvador"
En la Solemnidad del Corpus Domini



Es un Himno (secuencia litúrgica) que la Iglesia canta o recita antes del Evangelio, en la Misa de la solemnidad de Corpus Christi. Fue compuestao por Santo Tomás de Aquino tras la creación de la misa de Corpus Domini en 1264.
Su texto explica la doctrina del Santísimo Sacramento con precisión acabada y en un latín puro y conciso.
Según el gran liturgista Dom Guéranger: “Es aquí donde el más alto poder de una escolástica, no descarnada y trunca como la de hoy, sino jugosa y completa, como la de la Edad Media, ha sabido plegar el ritmo de la lengua latina a la exposición clara y precisa de un dogma, tan abstracto para el teólogo, como dulce y consolador para el corazón de los fieles”.
Su meditación pausada es un ejercicio espiritual de gran profundidad ante el admirable Misterio de la Fe.
Aquí la traducción en el actual Leccionario, del original latino:

SECUENCIA DE CORPUS CHRISTI

Glorifica, Sión, a tu Salvador,
aclama con himnos y cantos
a tu Jefe y tu Pastor.

Glorifícalo cuanto puedas,
porque Él está sobre todo elogio
y nunca lo glorificarás bastante.

El motivo de alabanza
que hoy se nos propone
es el Pan que da la vida.

El mismo pan que en la Cena
Cristo entregó a los Doce,
congregados como hermanos.

Alabemos ese Pan con entusiasmo,
alabémoslo con alegría,
que resuene nuestro júbilo ferviente.

Porque hoy celebramos el día
en que se renueva la institución
de este sagrado Banquete.

En esta mesa del nuevo Rey,
la Pascua de la nueva alianza
pone fin a la Pascua antigua.

El nuevo rito sustituye al viejo,
las sombras se disipan ante la Verdad,
la Luz ahuyenta las tinieblas.

Lo que Cristo hizo en la Cena,
mandó que se repitiera
en memoria de su amor.

Instruidos con su enseñanza,
consagramos el pan y el vino
para el sacrificio de la salvación.

Es verdad de fe para los cristianos
que el pan se convierte en la Carne,
y el vino, en la Sangre de Cristo.

Lo que no comprendes y no ves
es atestiguado por la fe,
por encima del orden natural.

Bajo la forma del pan y del vino,
que son signos solamente,
se ocultan preciosas realidades.

Su Carne es comida, y su Sangre, bebida,
pero bajo cada uno de estos signos,
está Cristo todo entero.

Se lo recibe íntegramente,
sin que nadie pueda dividirlo
ni quebrarlo ni partirlo.

Lo recibe uno, lo reciben mil,
tanto éstos como aquél,
sin que nadie pueda consumirlo.

Es vida para unos y muerte para otros.
Buenos y malos, todos lo reciben,
pero con diverso resultado.

Es muerte para los pecadores y vida para los justos;
mira como un mismo alimento
tiene efectos tan contrarios.

Cuando se parte la hostia, no vaciles:
recuerda que en cada fragmento
está Cristo todo entero.

La realidad permanece intacta,
sólo se parten los signos,
y Cristo no queda disminuido,
ni en su ser ni en su medida.

* Este es el Pan de los ángeles,
convertido en alimento de los hombres peregrinos:
es el verdadero Pan de los hijos,
que no debe tirarse a los perros.

Varios signos lo anunciaron:
el sacrificio de Isaac,
la inmolación del Cordero pascual
y el maná que comieron nuestros padres.

Jesús, buen Pastor, pan verdadero,
ten piedad de nosotros:
apaciéntanos y cuídanos;
permítenos contemplar los bienes eternos
en la tierra de los vivientes.

Tú, que lo sabes y lo puedes todo,
tú, que nos alimentas en este mundo,
conviértenos en tus comensales del cielo,
en tus coherederos y amigos,
junto con todos los santos.
Amén. Aleluya



En latín:

LAUDA Sion Salvatorem,
lauda ducem et pastorem,
in hymnis et canticis.
Quantum potes, tantum aude:
quia maior omni laude,
nec laudare sufficis.
Laudis thema specialis,
panis vivus et vitalis
hodie proponitur.
Quem in sacrae mensa cenae,
turbae fratrum duodenae
datum non ambigitur.
Sit laus plena, sit sonora,
sit iucunda, sit decora
mentis iubilatio.
Dies enim solemnis agitur,
in qua mensae prima recolitur
huius institutio.
In hac mensa novi Regis,
novum Pascha novae legis,
phase vetus terminat.
Vetustatem novitas,
umbram fugat veritas,
noctem lux eliminat.
Quod in coena Christus gessit,
faciendum hoc expressit
in sui memoriam.
Docti sacris institutis,
panem, vinum in salutis
consecramus hostiam.
Dogma datur christianis,
quod in carnem transit panis,
et vinum in sanguinem.
Quod non capis, quod non vides,
animosa firmat fides,
praeter rerum ordinem.
Sub diversis speciebus,
signis tantum, et non rebus,
latent res eximiae.
Caro cibus, sanguis potus:
manet tamen Christus totus
sub utraque specie.
A sumente non concisus,
non confractus, non divisus:
integer accipitur.
Sumit unus, sumunt mille:
quantum isti, tantum ille:
nec sumptus consumitur.
Sumunt boni, sumunt mali:
sorte tamen inaequali,
vitae vel interitus.
Mors est malis, vita bonis:
vide paris sumptionis
quam sit dispar exitus.
Fracto demum sacramento,
ne vacilles, sed memento
tantum esse sub fragmento,
quantum toto tegitur.
Nulla rei fit scissura:
signi tantum fit fractura,
qua nec status, nec statura
signati minuitur.
Ecce Panis Angelorum,
factus cibus viatorum:
vere panis filiorum,
non mittendus canibus.
In figuris praesignatur,
cum Isaac immolatur,
agnus Paschae deputatur,
datur manna patribus.
Bone pastor, panis vere,
Iesu, nostri miserere:
Tu nos pasce, nos tuere,
Tu nos bona fac videre
in terra viventium.
Tu qui cuncta scis et vales,
qui nos pascis hic mortales:
tuos ibi commensales,
coheredes et sodales
fac sanctorum civium.
Amen. Alleluia.




25 de mayo de 2016

DE LA VIDA EREMÍTICA


SOBRE EL MONACATO 

(brevísima reflexión)




Del PÁJARO SOLITARIO

Son cinco condiciones:

  1. La primera, que se va a lo más alto;
  2. la segunda, que no sufre compañía, aunque sea de su naturaleza;
  3. la tercera, que pone el pico al aire;
  4. la cuarta, que no tiene determinado color;
  5. la quinta, que canta suavemente.


Las cuales ha de tener el alma contemplativa:

  1. que se ha de subir sobre las cosas transitorias, no haciendo más caso de ellas que si no fuesen, 
  2. y ha de ser tan amiga de la soledad y silencio, que no sufra compañía de otra criatura; 
  3. ha de poner el pico al aire del Espíritu Santo, correspondiendo a sus inspiraciones, para que haciéndolo así, se haga más digna de su compañía; 
  4. no ha de tener determinado color, no teniendo determinación en ninguna cosa, sino en lo que es voluntad de Dios; 
  5. ha de cantar suavemente en la contemplación y amor de su Esposo. (San Juan de la Cruz).-
Del Monasterio del Cristo Orante, Mendoza



22 de mayo de 2016

GLORIA PATRI...

DOMINGO DE LA TRINIDAD

La Iglesia invita, en muchas oraciones y en el Salterio, a concluir la oración con una invocación a la Santísima Trinidad.

Es la llamada “doxología menor” que se reza en honor de Dios, uno y trino.

Así lo repetimos este día:

GLORIA PATRI, ET FILIO, ET SPIRITUI SANCTO!
SICUT ERAT IN PRINCIPIO,
ET NUNC, ET SEMPER, ET IN SAECULA SAECULORUM. AMEN

¡Gloria al Padre, y al Hijo y al Espíritu Santo!.
Como era en el principio, ahora y siempre,
y por los siglos de los siglos. Amén.




El altar mayor de la magnífica Iglesia de la Trinidad en París (s.XIX), 
-“Eglise de la Trinité”-  ubicada en Place d'Estienne d'Orves, 
muy cerca de la Estación de trenes San Lázaro. (Gare Saint Lazare)



En su atrio tiene tres fuentes, que memoran el misterio trinitario y arriba de ellas tres esculturas que representan las tres virtudes teologales. Al fondo de la foto, a la derecha se observa la Basílica del Sacre Coeur en Montmartre.

EN EL INICIO DE TODA SANTA MISA

IN NOMINE PATRIS,
ET FILII
ET SPIRITUS SANCTI

LA GRACIA DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO
EL AMOR DEL PADRE
Y LA COMUNIÓN DEL ESPÍRITU SANTO



De las Cartas de San Atanasio, obispo

    Siempre resultará provechoso esforzarse en profundizar el contenido de la antigua tradición, de la doctrina y la fe de la Iglesia católica, tal como el Señor nos la entregó, tal como la predicaron los apóstoles y la conservaron los santos Padres. En ella, efectivamente, está fundamentada la Iglesia, de manera que todo aquel que se aparta de esta fe deja de ser cristiano y ya no merece el nombre de tal.

       Existe, pues, una Trinidad, santa y perfecta, de la cual se afirma que es Dios en el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo, que no tiene mezclado ningún elemento extraño o externo, que no se compone de uno que crea y de otro que es creado, sino que toda ella es creadora, es consistente por naturaleza y su actividad es única.


       El Padre hace todas las cosas a través del que es su Palabra, en el Espíritu Santo. De esta manera queda a salvo la unidad de la santa Trinidad. Así, en la Iglesia se predica un solo Dios, que lo trasciende todo, y lo penetra todo, y lo invade todo. Lo trasciende todo, en cuanto Padre, principio y fuente; lo penetra todo, por su Palabra; lo invade todo, en el Espíritu Santo.

EPIFANÍA DE LA GLORIA TRINITARIA

Dimensión trinitaria de la Iglesia:

Pueblo de Dios,
Cuerpo Místico de Cristo,
Templo del Espíritu Santo
La imagen corresponde al coronamiento del magnífico Retablo colonial del antiguo altar mayor de la Santa Iglesia Catedral Metropolitana de Buenos Aires, consagrada bajo el título de la Santísima Trinidad así como también era el nombre de la urbe al ser fundada por Garay.



         La Iglesia en su peregrinación hacia la plena comunión de amor con Dios se presenta como un "pueblo reunido en virtud de la unidad del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo".

         Esta estupenda definición de san Cipriano (De Orat. Dom., 23; cf. Lumen gentium, 4) nos introduce en el misterio de la Iglesia, convertida en comunidad de salvación por la presencia de Dios Trinidad.

         Como el antiguo pueblo de Dios, en su nuevo Éxodo está guiado por la columna de nube durante el día y por la columna de fuego durante la noche, símbolos de la constante presencia divina. En este horizonte queremos contemplar la gloria de la Trinidad, que hace a la Iglesia una, santa, católica y apostólica.

         La Iglesia una, santa, católica y apostólica es pueblo de Dios, cuerpo de Cristo y templo del Espíritu Santo.

         Estas tres imágenes bíblicas señalan de modo luminoso la dimensión trinitaria de la Iglesia. En esta dimensión se encuentran todos los discípulos de Cristo, llamados a vivirla de modo cada vez más profundo y con una comunión cada vez más viva.

         Así pues, en la Iglesia encontramos una grandiosa epifanía de la gloria trinitaria. Por tanto, recojamos la invitación que nos dirige san Ambrosio: "Levántate, tú que antes estabas acostado, para dormir... Levántate y ven de prisa a la Iglesia: aquí está el Padre, aquí está el Hijo, aquí está el Espíritu Santo" (In Lucam, VII).

San Juan Pablo II, papa

Catequesis del miércoles 14 de junio de 2000

19 de mayo de 2016

PARADOJAS DE LA "NUEVA EUROPA"


LA MODERNIDAD "DIALOGA" CON LA HISTORIA EN UN "AMBIENTE MÍSTICO"

Un ejemplo de la nueva Europa secularizada






En la encantadora ciudad medieval de Maastrich, al sur de Holanda, se encuentra una iglesia impresionante que perteneció a los dominicos. Sus orígenes datan del año 800 de nuestra era, y fue consagrada en 1294 y confiscada por el ejército napoleónico 500 años después, en 1794. Es decir, que por más de 900 años fue un lugar consagrado al culto católico, y un gran centro de difusión de la fe, característica de la orden de Santo Domingo.
A partir de su confiscación tuvo diversos usos estatales (hasta fue un depósito de bicicletas). En 2004 se realizó un Plan de Recuperación de este templo, por los arquitectos Merkx + Girod para contener la Selexyz Dominicanen de la cadena de librerías del mismo nombre. La iglesia fue reciclada y transformada en una enorme Librería-Biblioteca, al estilo de lo realizado en el teatro porteño Grand Splendid de la Avenida Santa Fe. (Librería Nuevo Ateneo)
El espacio sagrado, que fuera por muchos siglos lugar de alabanza y oración a Dios es ahora un centro cultural-comercial donde se enaltece al hombre.

En lo que fuera el presbiterio y ábside del altar mayor se instaló una cafetería-restaurante y sillones para leer.

Este nuevo destino de la iglesia dominicana de Maastrich ha sido muy ponderado por los distintos sectores de la vida cultural de la ciudad, con elogios a la modernidad que “dialoga” con la historia, en un “ambiente místico”.
Abajo algunas fotos de este despropósito, donde pueden admirarse sus magníficas bóvedas y la calidad de su construcción en piedra, aunque ya sin ninguna obra de arte religiosa o que invite a elevar la mente y el corazón "hacia lo Alto".
Produce escalofríos ver el lugar destinado al bar, donde una mesa en forma de cruz se ubica donde se hallaba el altar del sacrificio eucarístico debajo del lampadario, y ahora es usado por comensales y lectores. Parece una burla no sutil.

La ciudad de Maastrich es muy conocida porque allí se firmó el Tratado (1992) que creó la Unión Europea. Este comentario se multiplica por miles de ejemplos a lo largo de toda la antigua Europa, donde -en el mejor de los casos- grandes catedrales y maravillosas capillas y conventos hoy son hoteles, museos o depósitos. Y las raíces que hicieron grande al Viejo Continente ¿dónde quedaron?
¿Llegaremos a ver estas instalaciones "culturales" en tantos magníficos templos de nuestra ciudad de Buenos Aires, hoy semivacios?
En el siguiente video puede verse esto:

14 de mayo de 2016

VENI SANCTE SPIRITUS!




 

¡VENI SANCTE SPIRITUS!


 

Al empezar así su invocación al Espíritu Santo,
la Iglesia hace suyo el contenido de la oración de los Apóstoles reunidos con María en el Cenáculo de Jerusalén;
más aún, la prolonga en la historia y la actualiza siempre.


 


Es el primer verso de la  Secuencia de Pentecostés, antiquísimo himno atribuido al Papa Inocencio III (1161-1216), que se canta en este día, con pensamientos de sublime espiritualidad.  Su lectura pausada y atenta es de gran riqueza interior. Aquí su original en latín y su traducción:

 





Latín
     Castellano


Veni, Sancte Spiritus,
Et emitte caelitus
Lucis tuae radium.
 
Veni, pater pauperum,
Veni, dator munerum,
Veni, lumen cordium.
 
Consolator optime,
Dulcis hospes animae,
Dulce refrigerium.
In labore requies,
In aestu temperies,
In fletu solatium.
 
O lux beatissima,
Reple cordis intima
Tuorum fidelium.
 
Sine tuo numine
Nihil est in homine,
Nihil est innoxium.
 

Lava quod est sordidum,
Riga quod est aridum,
Sana quod est saucium.
Flecte quod est rigidum,
Fove quod est frigidum,
Rege quod est devium.
 
Da tuis fidelibus
In te confidentibus
Sacrum septenarium.
 
Da virtutis meritum,
Da salutis exitum,
Da perenne gaudium.
 
Amen. Alleluia.


Ven, Espíritu Santo,
y envía desde el cielo
un rayo de tu luz.

Ven, Padre de los pobres,
ven a darnos tus dones,
ven a darnos tu luz.

Consolador lleno de bondad,
dulce huésped del alma
suave alivio de los hombres.
Tú eres descanso en el trabajo,
templanza de la pasiones,
alegría en nuestro llanto.

Penetra con tu santa luz
en lo más íntimo
del corazón de tus fieles.

Sin tu ayuda divina
no hay nada en el hombre,
nada que sea inocente.

 
Lava nuestras manchas,
riega nuestra aridez,
cura nuestras heridas.
Suaviza nuestra dureza,
elimina con tu calor
nuestra frialdad,
corrige nuestros desvíos.

Concede a tus fieles,
que confían en Tí,
tus siete dones sagrados.

Premia nuestra virtud,
salva nuestras almas,
danos la eterna alegría.

Amén, Aleluia.