HOMBRES DE LA IGLESIA EN EL CORAZÓN DEL
MUNDO
El Papa
Pablo VI decía a los Asesores y Dirigentes
de la Acción Católica
el 1 de mayo de 1967.
“Hijos carísimos de la
Acción Católica,
Queremos daros dos indicaciones que, aunque aparentemente contrarias, configuran un único programa de vida para vosotros:
¡Venid
siempre junto a nosotros!, que os esperamos con gran estima,
con gran afecto, con gran esperanza, porque vuestra fidelidad nos es necesaria, vuestra comunión nos compensa de todo.
con gran afecto, con gran esperanza, porque vuestra fidelidad nos es necesaria, vuestra comunión nos compensa de todo.
Junto
con esta primera indicación de marcha, la segunda es:
¡id, id lejos, lo más lejos que podáís!, como van los misioneros, en el mundo que nos rodea, en el mundo que se ha separado de la fe y de la vida cristiana;lejos, donde el sacerdote no llega, en el mundo de las realidades temporales,para que sople el Espíritu de vida.
¡id, id lejos, lo más lejos que podáís!, como van los misioneros, en el mundo que nos rodea, en el mundo que se ha separado de la fe y de la vida cristiana;lejos, donde el sacerdote no llega, en el mundo de las realidades temporales,para que sople el Espíritu de vida.
Próximos
y lejanos, como los discípulos, como los apóstoles...
Con nuestra bendición apostólica”
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