Sed dignos de una historia magnífica y de
una grande tradición, y actuad todavía mejor, porque los tiempos lo
exigen"
San Juan Pablo II.
El
motivo de estas notas se basa en esta frase del Papa Wotyla, dirigida a la
Acción Católica.
Una Asamblea es la
ocasión propicia para hacer memoria de la historia y proyectarse al futuro,
consolidando lo bueno y rectificando lo errado.
Toda
institución debe ser fiel a su identidad y a sus objetivos fundacionales.
Recordar sus principios y quienes fueron sus integrantes ayuda a lanzarse hacia
el futuro, con convicción y grandeza.
Y la
Acción Católica nació, no por la intuición de un fundador, sino por decisión de
la propia Iglesia. Decía Pío XI, no sin divina inspiración, que la tarea propia
de sus integrantes es la de "trabajar por la paz de Cristo en el Reino de Cristo".
Y esas
son las mismas palabras que nos recordaron en la oficialización: "no te
olvides que es tu deber trabajar por la pax Christi in Regno Christi".
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