SAN ANDRÉS, APÓSTOL
El primer discípulo de Jesucristo
El Evangelio de este II Domingo durante el año del Ciclo B (Jn. 1, 35-42) nos narra la elección de los primeros discípulos del Señor: Andrés y Simón Pedro.
San Andrés (cuyo nombre significa
"varonil") nació en Betsaida, población de Galilea, situada a orillas
del lago Genesaret. Era hijo del pescador Jonás y hermano de Simón Pedro. La
familia tenía una casa en Cafarnaum, y en ella se hospedaba Jesús cuando
predicaba en esta ciudad.
Andrés tiene el honor de haber sido el
primer discípulo que tuvo Jesús, junto con San Juan el evangelista. Los dos
eran discípulos de Juan Bautista, y este al ver pasar a Jesús (cuando volvía el
desierto después de su ayuno y sus tentaciones) exclamó: “Éste es el cordero de
Dios". Andrés se emocionó al oír semejante elogio y se fue detrás de Jesús
(junto con Juan Evangelista), Jesús se volvió y les dijo: "¿Qué
buscan?". Ellos le dijeron: "Señor: ¿dónde vives?". Jesús les
respondió: "Venga y lo verán". Y se fueron y pasaron con Él aquella
tarde. Nunca jamás podría olvidar después
Andrés el momento y la hora y el sitio donde estaban cuando Jesús les dijo:
"Vengan y verán". Esa llamada cambió su vida para siempre.
Andrés se fue luego donde su hermano
Simón y le dijo: "Hemos encontrado al Salvador del mundo" y lo llevó
a donde Jesús. Así le consiguió a Cristo un formidable amigo, el gran San Pedro.
Al principio Andrés y Simón no iban con
Jesús continuamente sino que acudían a escucharle siempre que podían, y luego
regresaban a sus labores de pesca. Pero cuando el Salvador volvió a Galilea,
encontró a Andrés y a Simón remendando sus redes y les dijo: "Vengan y me
siguen", y ellos dejando a sus familias y a sus negocios y a sus redes, se
fueron definitivamente con Jesús. Después de la pesca milagrosa, Cristo les
dijo: "De ahora en adelante serán pescadores de almas".
El día del milagro de la multiplicación
de los panes, fue Andrés el que llevó a Jesús el muchacho que tenía los cinco
panes. Andrés presenció la mayoría de los milagros que hizo Jesús y escuchó,
uno por uno, sus maravillosos sermones. Vivió junto a Él por tres años.
En el día de Pentecostés, Andrés recibió
junto con la Virgen María y los demás Apóstoles, al Espíritu Santo en forma de
lenguas de fuego, y en adelante se dedicó a predicar el evangelio con gran
valentía y obrando milagros y prodigios.
Una tradición muy
antigua cuenta que el apóstol Andrés fue crucificado en Patrás, capital de la
provincia de Acaya, en Grecia. Que lo amarraron a una cruz en forma de X y que
allí estuvo padeciendo durante tres días, los cuales aprovechó para predicar e
instruir en la religión a todos los que se le acercaban. Dicen que cuando vio
que le llevaban la cruz para martirizarlo, exclamó: "Yo te venero oh cruz
santa que me recuerdas la cruz donde murió mi Divino Maestro. Mucho había
deseado imitarlo a Él en este martirio. Dichosa hora en que tú al recibirme en
tus brazos, me llevarán junto a mi Maestro en el cielo"
Reliquia de la Cruz de San Andrés, cuando fue devuelta a la Iglesia ortodoxa rusa, y es venerada por el Patriarca en la Catedral de San Petersburgo.
Dichoso tú, querido apóstol Andrés,
que tuviste la suerte de ser
el primero de los apóstoles en encontrar a Jesús.
el primero de los apóstoles en encontrar a Jesús.
Y que luego le seguiste,
cuando te eligió para ser “pescador de hombres”
cuando te eligió para ser “pescador de hombres”
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